Hace poco más de dos meses cumplí los 25 años, lejos de mi familia y mis amigos del sur. Es extraño pero a pesar de todo lo que ha pasado este último tiempo, estos meses he sido muy feliz, me ha ido bien en la universidad, me cambie de casa, sigo trabajando y pronto tendré vacaciones, encontré a una persona que hace que todos los días sean diferentes y me da paz y seguridad. Nunca pensé en decirlo pero soy muy feliz con él y no tengo ganas de dejarlo jamás. Siempre fui reticente con las historias de amor y en general con el romanticismo, eso no va conmigo, pero nuestra historia es muy especial, y por lo mismo nuestra relación también, nos parecemos en la forma de pensar, de ver el mundo y en nuestros gustos.
Cuando era niña siempre me imagina a los 25 años como una mujer independiente, trabajando en algún medio prestigioso, viviendo en otro país, recorriendo el mundo. Con el paso del tiempo me fui dando cuenta que eso no ocurriría, me fui decepcionando de muchas cosas, de mi carrera, del trabajo, del país, de la gente… Soy una persona extremadamente complicada, detallista, perfeccionista y obsesiva con el orden, esto siempre me ha complicado en mis relaciones con el resto de las personas, pero es esto lo que me hace ser como soy, es mi esencia, sino fuese así jamás hubiese hecho las cosas que hago.
Ahora en estos momentos, a mis 25 años, en pleno proceso de autorrealización puedo decir que soy feliz, que aunque carezca de dinero, mis seres queridos estén lejos, y no logré recorrer el mundo aun, estoy con la persona más maravillosa que he conocido y eso hace que todo cambie, todo.
